El influjo de la luna

LUNA LLENA

Esta foto, lo dice todo...
PODEROSA LUNA LLENA.
La luna..." lux, lucere " ( brillar, lucir ), significa: Luminosa,  la que ilumina.
Los días de luna llena son muy auspiciosos. Buda nació, se iluminó y murió con luna llena en el mes de abril-mayo. Transmitió sus enseñanzas los días de luna llena.
Son días especiales para nuestra práctica de yoga; ocasión para renovar nuestro compromiso.
¿Te das cuenta cómo la luz de la luna es sólo el reflejo de la luz del sol?
Es una luz pálida. Al ser su reflejo, es como un espejismo, una nebulosa, calmante y pacífica, y si te abres a ella en todo su esplendor es un bálsamo que te envuelve y suaviza tu cuerpo, mente y espíritu.
Tu sistema nervioso lo va a agradecer.
Con la vida que llevamos tan agitada, no nos paramos a contemplar la naturaleza y el efecto que produce en nosotros. La verdad es que no nos paramos a contemplar nada, somos máquinas de hacer y hacer.

Te invito a un pequeño " parón " esta semana.
Contempla la luna llena... incluso, pasea bajo ella, entre la luz y la sombra.
Recuerdo todavía los largos paseos que me daba cuando era muy pequeña bajo la luna con el calor estival. Caminaba sola, llena de una mezcla de emoción mágica y atenta, todavía está impresa en mi mente esa claridad que bañaba mi piel y abría mi conciencia al máximo, estando alerta al más mínimo sonido de la noche.
La naturaleza es sabia, se adapta a los cambios cíclicos, está en profunda armonía y equilibrio.
Las hojas se caen para que crezcan después las flores y frutos, algunos animales hibernan para volver a salir a la luz en primavera... en el invierno hay una quietud espectacular en la naturaleza, que lleva al recogimiento, al interior. 
Nosotros, sin embargo, estamos hacia afuera, sumidos en una frenética actividad agotadora; vamos contracorriente. 

La naturaleza se desprende... nosotros, ¿de que nos desprendemos? de nada; al revés estamos todo el día acumulando. Y ya no hablo sólo de lo material, sino de emociones negativas, represiones, agobios, malhumor, estrés... 

Igual que las mareas están relacionadas con los ciclos lunares, nosotros, al ser 70% agua, nos vemos afectados.
Por eso, vamos a aprovechar estos cambios para utilizarlos con inteligencia; a nuestro favor.
Para encontrar este equilibrio que tiene la naturaleza, hay que observarla y acercarnos a ella, como han hecho tantas civilizaciones anteriores a la nuestra. Vivían muy conectados con los ciclos naturales.
Tenemos que recoger toda su sabiduría y entender que el invierno es yin y el verano Yang.
                                              yin yang
Como yin yang que somos, dos energías opuestas, que se complementan, debemos equilibrarlas para encontrar armonía en nuestra salud física y mental.
Os indico algunas pautas que podemos llevar a cabo estos días :
                                 Semana del equilibrio

Observar siempre el estado de la luna en el calendario; sobretodo, luna llena y luna nueva.
En estos días se aconseja para la práctica de yoga; o bien no hacerla (en algunas tradiciones de la India, así se hace) o, lo que te recomiendo es practicar con mucha consciencia y suavidad.
Todos los días podemos practicar respiración alterna (nadi shodhana), en su versión sencilla: inhalas por la fosa nasal izquierda, exhalas por la derecha, inhalas derecha, exhalas izquierda. Unos 10 minutos.
Shodhana significa " purificación " y nadi " pasaje o canal energético ", es la respiración que equilibra nuestros dos nadis, ida y pingala. Con esta técnica  restablecemos cualquier desorden mental o emocional, y nos va a ayudar a sacar mayor provecho en nuestra meditación.
Ida fosa nasal izquierda, luna, femenino; relacionado con nuestro hemisferio derecho del cerebro ( expresión no verbal, intuición, emoción, creatividad...).
Pingala fosa nasal derecha, sol, masculino; relacionado con el hemisferio izquierdo. ( expresión verbal, racional, Lógica... )
De esta manera equilibramos masculino, femenino, actividad, pasividad a lo largo de estos días lunares: EQUILIBRIO

La LUNA LLENA, corresponde al pleno de la inhalación, donde la fuerza del prana es mayor Sin el yin no puede existir el yang y viceversa.. La energía es muy fuerte. Al subir la marea, los fluidos corporales ascienden, dando lugar a una " marejada " en nuestro interior. La fuerza expansiva es ascendente, nos hace sentir energéticos internamente, pero emocionalmente no estamos muy centrados. La luna al ser agua, hace que podamos sentirnos invadidos por un gran flujo emocional. También te puedes sentir muy cansado, sensación de estar " inflado ", de pesadez, lentitud y espesor mental. Es una cuestión de que te observes.
Todo ésto es normal; se debe la influencia que ejerce la luna en nosotros... y está bien saberlo, para que no te inquietes si te encuentras en ese estado y no sabes porqué. 
Por eso, en cualquier ámbito, hagamos lo que hagamos, tenemos que tomárnoslo con calma y estar muy alerta, muy conscientes.
Si practicamos yoga o algún otro deporte podemos lesionarnos.
Para estos días se aconseja la meditación, el estudio filosófico y el canto de mantras.


La LUNA NUEVA es descendente, corresponde a la exhalación, con inclinación al agotamiento físico, pero mentalmente más calmados y centrados. Es un período para el emprendimiento y la renovación.
Al descender las mareas, los líquidos de nuestro cuerpo descienden, por tanto, hay mayor sequedad en las articulaciones y mayor riesgo de  lesiones.

Así que, dejémonos envolver por esta energía yin :

Principio femenino, invierno, tierra, oscuridad, pasividad, absorción. LUNA

La energía yang : masculino, cielo, luz, actividad, penetración. SOL

En el equilibrio está la sabiduría. Como dijo Buda: el camino del medio.

Si pones mucha energía yang en tus acciones, demasiado control, actividad, demasiada voluntad, te puedes exceder y dañar. Si tienes demasiada energía yin y te dejas llevar por la pasividad, creciente sensibilidad, " dejadez " te puede conducir incluso a la melancolía y apatía.

En mi práctica diaria, me gusta hacer chandra namaskar ( saludo a la luna ) y yin yoga.

Podéis ver este video de GODFREY DEVEREUX; he practicado con él cuando viene a Madrid y nos complace con sus cursos.

Es un saludo a la luna muy sencillo. Si practicáis solos en casa, es muy recomendable.

Este otro video de Shiva Rea, maestra del yoga flow, es muy conveniente si necesitas soltar y suavizar tus articulaciones. Requiere de un poco más de tiempo para aprenderlo y practicarlo, pero merece la pena que experimentes.

Os adjunto también la página web de BERNIE CLARK, precursor de la técnica de Yin yoga.

En su página explica lo que es y además tiene vídeos suyos para que consultes:  www.yinyoga.com

Otra práctica excelente para estos días son posturas restaurativas y reconstituyentes de yoga. Las asanas las realizas con ayuda de accesorios de yoga; donde descansas apoyándote en soportes ( mantas, cojines...).
Los beneficios son altamente terapéuticos, ya que te llevan a una relajación profunda física, psiquica y espiritual mediante una respiración consciente y presencia mental.
Apto para todos.
Especialmente me gusta el libro de JUDITH LASATER:

" Posturas pasivas para un yoga reconstituyente " 
                  Relajarse y renovarse

Gran parte de la luna es oscuridad, por eso es yin, aunque aparentemente sea luminosa. Las manchas que tiene, me recuerdan a nuestras sombras de oscuridad, a esa parte que todos tenemos dentro de la la luz que ya somos.
Me parece interesante que sepáis que estas manchas se denominan " mares ".
Y llevan los nombres  de Mar de la serenidad y Mar de la fecundidad.
¿ No es bonito ?
La luna me serena.
Ayer, mi hijo me explicó que en la luna como no hay aire no hay sonido: " no air, no sound ". Eso estudian en Science.
Me fascina la luna... por su silencio.

Ahora sólo tengo que saber... si nací en luna llena, como Buda... porque en el mes de mayo está claro que sí!

¡Que nos iluminemos, que pongamos luz en nuestra oscuridad, que reflejemos esa luz a los demás!
Se me olvidaba deciros... que ya estamos iluminados... jajaja

Atentos a la luna y... a los hombres - mujeres lob@... jajaja

Paz y silencio.
Namasté