domingo, 10 de febrero de 2013

Namasté: De mi alma a tu alma.

Comienza el camino del guerrero. Día a día...
Soy María Icaza, mi nombre espiritual es Vishnupriya (La amada de Vishnu).
Emprendo este camino de abrir mi corazón.
Hace años escribí una canción que se titulaba: "Soy un samurai, un guerrero errante".
Esto ya dice mucho de mí.
Es el primer día que escribo en este blog y al poner en la entrada: "Nace un guerrero". He recordado que hace ya casi 20 años me tatué la palabra kiai.


Creo que desde ese día esa palabra se implantó en mis células ya que hoy me he dado cuenta que es la fuerza que me guía.
Es el grito del guerrero, el grito del alma.
"Ki" significa: Resolución, espíritu. "ai": Unir. Es la unión de la energía vital.
Es la plena concentración de energía, es el enfoque.

Este grito nace desde tu centro. Cuando estás lleno de ki (Prana), es decir, de esa energía, de esa pureza, vences al enemigo, que en el camino del yoga y la meditación son:
nuestros samskaras, sombras, negatividades, deseos aversiones, apegos...

El guerrero-yogui combate, se enfrenta cara a cara consigo mismo. Con el Kiai haces un cuerpo fuerte por medio de una mente fuerte. Necesitamos una mente estable y fuerte para avanzar con un empuje de Valentía.

La verdadera valentía es aspirar a lo más elevado: Ir hacia adentro y ver.
En la vida cotidiana sentimos muchas veces que tenemos que combatir, marchar hacia adelante, una vida de dificultades, expectativas, de momentos llenos de dicha, retos, propósitos, recompensas, fracasos...
Para continuar tienes que ir hacia tu interior, al centro de tu ser y descubrir todo el poder que ya está en ti, que siempre está contigo, aunque, a veces lo olvides.

Esta cita de la semana de Swami Muktananda nos ayuda a despertar nuestra valentía interior.

"Debes ser valiente, debes ser puro, debes tener arrojo,entusiasmo y tienes que sentir que puedes lograr todo" 

Tenemos que ser guerreros del alma y hacer el esfuerzo de mantener nuestro corazón en equilibrio. Esa es la fuerza del guerrero, la fuerza del corazón.
La idea que mejor expresa el kiai es:
 "la suavidad conquista la dureza"  

Con esto, me gustaría dedicar esta primera entrada a Gurumayi, mi inspiración, con una de sus citas que abarca todo conocimiento:

"En el principio amor,
En el final, amor,
En medio,
Tenemos que cultivar virtudes"

 de su libro: "Mi Señor ama un corazón puro"

Swami Muktananda, maestro de Gurumayi Chidvilasananda, son parte de un linaje de siddha yoguis que tiene sus raíces en una de las más antiguas filosofías tántricas y místicas de India: El Shivaismo de Cachemira.
Podeís encontrar más información en su web: www.siddhayoga.org

Espero con este blog poder compartir con mis amigos, compañeros, alumnos toda la información que podamos recoger.
Envíame comentarios, citas, lecturas, cursos, conferencias, alguna propuesta...
Que podamos hacer circular toda esta energía por el bien de todos.
Os saludo como hacemos en vipassana:

Metta (Amor puro y compasivo)

Sé feliz.



































6 comentarios:

  1. Hola María,
    Enhorabuena por el blog. Lo seguiré.
    Encantada de empezar un nuevo camino contigo.
    Besos
    Rocío (Sita)

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    1. Muchas gracias Sita!
      Eres la primera que comenta en el blog. Inaguras la página!
      Estoy feliz de habernos conocido y avanzar juntas.
      Un fuerte abrazo.
      Namasté

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  2. Hola María,
    enhorabuena por tu nuevo camino como guerrera y samurai!
    Gracias por compartir con tod@s nosotr@s tus vivencias desde esta nueva ventana.
    Namsté (de mi alma a la tuya),
    Lucía

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  3. Namasté Lucia,
    Muchas gracias a tí por darme tu confianza y por tu generosidad.
    Un abrazo

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  4. Me ha encantado tu animosidad y fuerza. Acabo de empezar a realizar yoga nuevamente, cuando era adolescente tube un maestro maravilloso que se marcho de España y no continue porque no encontre a nadie como el. Ahora despues de muchos años, y una terrible experiencia debido a una enfermedad, vuelvo al yoga de la mano del Ayurverda; la medicina con la que he vuelto a la vida y de la que me siento profundamente agradecido.

    Muchas gracioas. Un saludo.
    Miguel Angel

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    1. Muchas gracias Miguel Angel. Me anima aún más saber, que el yoga te haya ayudado tanto en esos momentos tan difíciles y que yo pueda colaborar un " poquito " en ello.
      Un abrazo.

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