domingo, 10 de marzo de 2013

El desapego en la vida cotidiana

Desapego es un concepto que nos lleva a sentir confusión y crea en nuestra mente gran contrariedad.
La definición literal dice: " Falta de cariño o interés, alejamiento, frialdad ". 
Esta idea es la que nos confunde y no nos deja ver lo que realmente significa.

Cuando uno se acerca al yoga y escucha esta palabra, se resiste; porque tiene una idea antigua arraigada en su mente.

Para mí, desapego significa: ser amoroso; porque no te aferras y das sin condiciones; puedes ayudar mejor a otra persona porque te mantienes de observador y sobre todo das plena libertad al otro y tú también te sientes libre. Cuanta mayor libertad mayor acercamiento.

El apego te ata, te absorbe, te controla, te hace dependiente. 
Si te apegas a tus ideas preconcebidas, vas a debilitar tu capacidad y estarás cerrado a infinitas posibilidades que aparecen en la vida. Qué pena, qué tristeza cerrarte y darte cuenta quizá demasiado tarde de lo que te has perdido...

El apego se crea por tus miedos y falta de seguridad.

Estas citas de Osho lo dejan muy claro:
 " El apego significa que estás usando a otra persona como centro de tu ser " 
La pregunta que nos hacemos es: ¿ Cómo ser sensible y sin embargo desapegado ? 
Con la mente limitada, el desapego se entiende como un acto frío, como si no te afectara nada.
" Existe la creencia de que si eres muy sensible te apegas, pero ésto es sentimentalismo. El sentimentalismo es común, la sensibilidad es extraordinaria. sucede mediante el esfuerzo, es un logro, el sentimentalismo es una herencia genética, la sensibilidad no la tienes cuando naces,  te tienes que esforzar por conseguirla. Si eres más sensible serás más desapegado, o si eres más desapegado serás más sensible. La sensibilidad no es apego, es conciencia. Cuando eres inconsciente, eres totalmente insensible. Por tanto cuanta más conciencia mayor sensibilidad. La falta de conciencia, es la causa del apego. El apego es una cualidad burda, no es sutil.

Hace tiempo un chico me dijo: " Tú me completas ", en ese momento de  enamoramiento ", hasta me sentí halagada.
Al poco; reflexionando sobre está frase, me di cuenta de que mi ego se sintió halagado; mi propia ignorancia.  
" ¡Qué te voy a completar... en nada...si ya eres completo! ".
Más tarde esta persona demostró su falta de confianza en sí mismo y sus muchas dependencias.

¿ Por qué nos apegamos tanto a las personas ?
No nos sentimos completos, sentimos que nos falta algo y ponemos ese algo en el exterior.
Si descubriéramos lo que somos realmente, podríamos amar con libertad; dos seres libres, totales, completos.
Si no te apegas a otra persona, le están dando libertad y así, no le haces dependiente.
Las personas dependientes no pueden amarse porque basan en el otro su propia felicidad o infelicidad.
Qué bien se siente uno cuando por fin ha soltado una relación que le oprime.

El desapego trae ligereza y fluidez a nuestras vidas.

Gran parte del apego viene de nuestro continúo desear; nuestra avidez por TENER, para llenar nuestros vacíos.
Vamos cargándonos de hábitos, costumbres, cosas, emociones, relaciones, condicionamientos... y empezamos a acumular sin darnos cuenta.

Lista de apegos varios...
" no podría vivir sin mi café de la mañana...me muero..." jajaja
" sin esta crema, sin mi gel de pelo, sin mi secador..."
" que haría yo sin mi chocolate..."
" sin mi cigarrito, mi cervecita, y mis uñas sin arreglar..."
" No podría vivir sin mi camita limpia (cuando vas a India y duermes en un cuchitril... te ríes de ésto )
Y no digamos ya..." sin mi coche, sin mi casa de veraneo, sin mi viajecito, sin ir a esquiar... y más difícil todavía: en silencio 10 días, sin móvil, sin ordenador, sin mis hijos, sin mi marido - mujer...( bueno éso es más fácil )... jajaja

Claro que se puede. Se puede vivir con poco: " Vida sencilla pensamiento elevado "  como decía Sivananda.

Estamos llenos de adicciones inconscientes.
Una adicción es aquello que no puedes dejar por voluntad propia, te esclaviza , te puede, entras en ansiedad si te falta el objeto deseado. La adicción está en tu mente, ya que tu cuerpo se limpia en poco tiempo. 
En tu mente, se cristaliza, por eso es más difícil el desapego.

Otra lista divertida, Llena de reproches y quejas:
" Yo no tengo ningún problema, si los demás cambiaran aunque sea un poquito, sería feliz. Con todo lo que yo hago por ellos, con todo lo que les doy y así me responden "
" Que injusticia "
" si me quisiera..."
" si me sonriera..."
" si por lo menos me mirara y se diera cuenta.."
" si mi jefe..."
" si mi hijo..."
" si mi marido - mujer..." 
" si mi amiga..."

Siempre dependiendo de una respuesta por parte de los demás. Es el ego el que necesita la aprobación... " un árbol está, crece, es; ofrece sus flores, sus  frutos y no está esperando a que tú lo mires y digas: " qué hermoso ". La naturaleza, la tierra... sólo da.

En esta lista hay muchos " mis ", como si las personas nos pertenecieran y además tuviéramos el derecho de controlar. 
Otra vez el apego; suelta, nada ni nadie te pertenece
Mírate más a ti mismo y deja a los otros.

¿ Por qué esperar algo a cambio ? Si esperas te frustras, porque no siempre te van a a dar lo que quieres o las cosas no van a ir como tu deseas. No eres el centro del mundo.
¡ Suelta, da, sé generoso y ya está ! Regala justo lo que más te gusta, no lo que tengas repetido o ya te has cansado .
En serio, empieza haciendo ésto, regala lo que más aprecias a alguien que amas. A ver si eres capaz...

Deja algún hábito que sepas que no te aporta nada, que incluso no te hace bien. 
Prueba a estar algunos días sin algo o alguien que creías que iba a ser IMPOSIBLE y verás que eres capaz.
Que una costumbre no nos controle, que no sea dueña nuestra. Podemos cambiar, podemos ser los dueños de nuestros actos, somos los arquitectos de nuestro destino.  

El DESAPEGO lo tenemos que trabajar en pequeños actos cotidianos:

Vacía tus armarios: significa tener la ropa justa, la comida necesaria, las cremas que necesitas, utensilios etc
Acumula lo menos posible: todo lo que almacenas, coleccionas, guardas...para qué, si lo vas a tener que dejar.

Todos estos apegos innecesarios son " basurilla " que se acumula en nuestra mente.
¿ Cómo vamos a meditar, a vivir medianamente en paz con todo este almacén desordenado en nuestro interior ? 

Un anécdota que me ha ocurrido estos días con unas amigas: estamos asistiendo a un curso y el destino nos lo está poniendo difícil, siempre llegamos " por los pelos ". Cada día sucede algo que nos hace entrar en ansiedad, (son resistencias ), pero finalmente conseguimos llegar y alcanzar nuestro objetivo.
Hoy nos hemos reído mucho recordando el nerviosismo y el " acelerón " que llevábamos ; " un grupo de posesas " perdidas buscando una dirección y nada más ni nada menos que para ir a un curso de meditación Zen! Jajaja... Menudo ejemplo... 
Pero esas son nuestras reacciones, nuestras sensaciones, emociones...  si ocurren no las podemos negar.

Podemos poner mayor CONCIENCIA, cambiar el "Chip " y soltar rápido, desprendernos, y así practicamos el desapego.

Por cierto... un atasco y la falta de parking en Madrid puede llegar a sacar la fiera que llevas dentro jajaja... ahora os entiendo.

Hace poco nos reíamos una amiga farmacéutica y yo porque  la gente entra en " pánico " cuando no queda el cepillo de dientes del color que les gusta...

¿ Te das cuenta hasta que punto podemos llegar con el apego ? ¿ Pero a que a todos nos ha pasado algo parecido alguna vez ?

La meditación nos ayuda a volvernos cada vez más desapegados. Si sientes que tus apegos están creciendo es que estás haciendo algo erróneo.
" El despego vendrá como una consecuencia cuando medites. entonces puedes ir a cualquier parte y permanecerás sin perturbarte, sin miedo. Cuando estás apegado, estás perdiendo tu centro y otra cosa o persona está volviéndose el centro de tu SER. Cuando dejes el cuerpo, lo dejarás sin rasguño."
Estamos condicionados por nuestro cuerpo, mente, ideas y emociones  pasadas, futuras... y sabemos que es difícil desprenderse, pero no imposible.
Tu cuerpo es un instrumento, no eres tú, cuando mueres lo devuelves al universo... es sencillo.
Un condicionamiento es aquello que nos han dicho, educado, que hemos vivido, que ha quedado impreso, con lo que nos hemos querido quedar cada uno; es algo creado, igual que lo recibiste lo puedes soltar.
Eso no eres tú, no es real.
¡ Cuantas veces nos ha ocurrido estar apegados a una idea o persona y pasado el tiempo ni te acuerdas !    
Si lo piensas, hay montones de nimiedades a las que estábamos apegados y hoy ni nos importan.

Tú eliges: o quedarte " enganchado " a un pensamiento irreal o comprender que no es tuyo y que no te pertenece.

Puntos clave para sentir desapego en lo que haces:

1. No pensar jajaja... ¡cómo!... deja tu mente. Vacía ( como tu armario ), y no pienses en hacer las cosas bien o mal. Sólo hazlo.

2. No esperes ningún resultado. Si no esperas no te frustras. Cualquier actividad hazla concentrado, atento, sin esperar la aprobación de nadie. Qué te importa si a uno u otro le gusta o no, lo que haces. Es imposible agradar a todo el mundo.

3. Lo que hagas lo haces para ti y los demás con verdadera entrega y gratitud. Si no, mejor no lo hagas.

4. Habla y actúa desde el corazón, desde lo más veraz que hay en ti. Cuando te expresas desde lo que sientes ( con humildad ), la otra persona lo va a recibir como una flecha que va directa a su corazón. Empatizas.

5. Que lo que digas y hagas lo conviertas en algo tuyo.
Desde tu experiencia. Aunque sean enseñanzas de otras personas o maestros,
Recoge lo que más vibra en ti, vívelo, interioriza, experimenta y ofrece sin querer recibir a cambio.
Ya te llegará la recompensa....  ¡ seguro ! porque el corazón se desborda de alegría.

Esta práctica se llama KARMA YOGA. Es el yoga de la acción desinteresada. Todo lo haces con espíritu de servicio, entrega y desapego.
Lo que haces, lo haces con amor.
Así no tendrás esa larga lista de reproches... 

Recojo unos fragmentos de este sueño que nos cuenta Gurumayi en su libro, " Valentía y contentamiento " :

" Soñé que nadaba con varios devotos en el mar y con algunos leones y tigres. Todos nos divertíamos mucho. De pronto alguien me gritó: ¡ Ahí vienen, ya empezaron !
Alzamos la vista y vimos unas olas gigantescas. Todos los demás eran espléndidos nadadores pero yo no, no tenía posibilidad de escapar. Decidí que lo mejor que podía hacer era entregarme por completo al mar, y dejar que las olas me cubrieran como si no tuviera vida. Me quedé totalmente serena, inmóvil y sin peso, para que el mar pudiera pasar sobre mí y hacer conmigo lo que quisiera. En lo más profundo de mi ser sabía que esa era la actitud más valiente que podía tener.
Mi ser entero bañado por esa entrega incondicional y por el contentamiento absoluto de esa entrega. Había sido mi elección.
Había sido llevada con suavidad a la playa.
Uno de los leones, que había sido arrastrado a la orilla, terriblemente herido, creyó que podía luchar contra las olas y vencerlas. Nos acercamos a él y nos dijo: El mar no me hizo daño, lo que me hizo daño fue mi propio orgullo ".


El desapego es confiar, dejarte... fluir.

Este sueño de Gurumayi entró una noche en los míos y se quedó muy dentro...

Namasté 















4 comentarios:

  1. Gracias María, me ha encantado... y como siempre llega en el momento oprtuno.
    Marta de la Torre.

    ResponderEliminar
  2. Muchisimas gracias, Maria! Me viene muy bien todo esto, en plena revolucion interna ;-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cuanto me alegro!! parece que el tema se presenta en el momento adecuado...
      Que bien tener una revolución interna en esta época de cambios.
      Es una buena señal de renovación.
      Besos y gracias a tí.

      Eliminar